A media mañana del 12 de agosto de 1806, la estrategia española de sitiar a los invasores en la Plaza Mayor es culminada por el más completo éxito.
No poco ha contribuido a esto el regimiento de Miñones Catalanes, que, bien pertrechado, se ha ocupado de aniquilar uno a uno los piquetes avanzados ingleses, o los marineros enrolados en el ejército que, como gatos, saltan de azotea en azotea limpiando las calles de enemigos. La desesperada estrategia inglesa consiste entonces en el agrupamiento en la Recova, situada en el centro de la Plaza, y Beresford ordena el abandono del Cabildo, la Catedral y las demás casas. Pero la presión se hace excesiva.
La caballería de Pueyrredón ataca al regimiento 71 de Highlanders mientras se retira, haciéndose con la banderola de una de sus gaitas
Así, mientras los soldados reclutados en la isla de Santa Elena entran en el Fuerte, los bravos Highlanders defienden a su general en círculo bajo el arco de la Recova. Las bajas inglesas se multiplican al ser acribillados desde todas las direcciones. A los pies de Beresford muere el capitán Kennett, su ayudante…