
Más inquietante aún que los recortes en la reserva y el declive de las capacidades a nivel táctico era el hecho de que muchos oficiales de alta graduación de las IDF, tanto regulares como de la reserva, no habían recibido una formación adecuada. «Los brigadieres generales tenían una instrucción insuficiente y los comandantes de formaciones superiores a la brigada no dirigieron sus unidades en los entrenamientos durante años», escribió Tira. «Algunas unidades de la reserva no se entrenaron agrupadas en grandes formaciones durante 4 o 6 años. Lo relevante aquí es que esta formación deficiente no fue el resultado de negligencia u omisión, sino de una política deliberada».
Con la nueva doctrina de las IDF se eliminó la formación de tamaño cuerpo de ejército, y había planes para abolir también la división cuando estalló la guerra en 2006. Según Tira, Halutz y los seguidores del Diseño Operacional Sistémico (SOD) de Naveh «no les veían utilidad a las formaciones terrestres mayores a la brigada». Los brigadieres generales debían mandar un elemento que traducido del hebreo significa «Tendencia de Campaña» o «Tendencia Operacional». Estos elementos serían responsables de implementar «un efecto específico en el marco de las Operaciones Basadas en Efectos (EBO)». Cada brigadier general mandaría una Tendencia de Campaña para obtener un efecto, y la conjunción de todas ellas constituirían las EBO.
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