La Spanish Company, se componía de sesenta y cuatro miembros de orígenes muy diversos. El capitán Joseph Torrens se alistó con cuarenta años, pero a lo largo de toda la guerra tuvo que darse de baja varias veces por problemas de salud y de índole familiar, pues el 29 de septiembre de 1861 se le diagnosticó una enfermedad en el riñón.
Tras serle denegada su baja en el Ejército en dos ocasiones, dimitió finalmente el 21 de diciembre, aunque el 17 de abril de 1862 fue adscrito a otra unidad de voluntarios de Nueva York, Les Enfants Perdus. Dejó las Fuerzas Armadas de la Unión definitivamente el 1 de junio de 1863. El capitán Torrens había nacido en Barcelona, el 13 de diciembre de 1820, y falleció el 23 de abril de 1895.
Sus restos descansan en el cementerio nacional de Arlington junto con los de su esposa, Mary Murphy, quien le sobrevivió siete años. El primer teniente José Romero llegó a Nueva York en un vapor proveniente de Cuba en 1859, pero terminó siendo cesado por incompetencia. El español Francisco Luque se alistó a la edad de treinta años con el grado militar de sargento; más adelante fue destinado a la Compañía K como segundo teniente el 1 de agosto de 1861, empero dejó el Ejército el 7 de octubre de ese año por problemas familiares.
Sin embargo, sobre él consta un documento de alistamiento de febrero de 1863, en el que se declara su procedencia, de la ciudad de Nueva York, y su aptitud para servir, como oficial de una compañía, en el Ejército de Estados Unidos en su condición de voluntario por un periodo de tres años o por la duración de la guerra.
El español José Flores Porras, un marinero de Málaga, era corneta y cayó enfermo en Petersburg e ingresó en el hospital en mayo de 1862. Posteriormente sirvió como cocinero en el hospital de Claryville hasta el 15 de junio de 1863. Más tarde volvió a desempeñar sus funciones de corneta en el cuartel general de la 3.ª Brigada entre los meses de julio y septiembre de 1863, para servir a continuación en las ambulancias. Fue dado de baja el 21 de febrero de 1864, pero se volvió a alistar al día siguiente como voluntario, y recibió una prima de enganche de cien dólares, por un periodo de dos años.
Desertó el 11 de abril de 1864. Otro malagueño alistado en el Ejército de la Unión fue Miguel Martínez; lo hizo a la edad de veintiocho años y era marinero de profesión. Fue adscrito al Cuerpo de Ambulancias, en Union Mills, en enero de 1863; se licenció del Ejército el 24 de junio de 1864 en Nueva York….